Obra nueva
Oreja de cerdo elaborada en sal siguiendo la tradición milenaria.
Bastante rica
Se me olvidó pesarla pero por tamaño no creo que llegara a los 500 g. Si venía muy bien lavada, en una bandeja tipo imitación bambú o madera.
Sabor rico pero sin diferencia a las orejas a las que estoy acostumbrado a comer de cerdos selectos o de "casa" aunque sean de carnocerías del Bierzo, León, Zamora y Soria.
Rica, tierna pero cara