MENCÍA ESPECIAL DEL JURADO

MENCIA ADEGA VELLA (DO Ribeira Sacra)

Javier heredó una casa labriega del siglo XII en los montes de A Teixeira, en las laderas del rio Sil. Mientras restauraba y convertía la casa en su "Adega Vella", recuperó los viñedos de los montes que la rodeaban, montes con una pendiente promedio del 65%, para elaborar vinos de autor 100%. Javier solo utiliza variedades autóctonas y, en este caso, la suma de la uva Mencía y la viticultura heroica de Javier dan como resultado una Medalla de oro en el concurso Aosta 2013. Sin embargo, nunca habrá reconocimiento suficiente para el honesto y apasionado trabajo que Javier pone en sus vinos. Nosotros sencillamente le agradecemos que haga lo que hace para poder seguir disfrutando de su viticultura heroica y de este Mencia Adega Vella de la Ribeira Sacra.

MENCIA JOSE ARISTEGUI (DO Valdeorras)

Un mencía de autor limitado a 2.000 botellas. Original de las "leiras" de pizarra y arcilla que hay en las laderas del rio Sil en los alrededores de A Rúa, en plena comarca de Valdeorras. Las mismas "leiras" donde el abuelo de Arístegui plantó sus viñedos en los años 30 del siglo pasado. Las mismas "leiras" y viñedos que ahora él cuida con tanto mimo para elaborar vinos de autor entre los que se encuentra este mencía, que tras ser criado durante varios meses en barrica de roble francés, destila un sabor a uva pura y sin artificios.

Arístegui tardó años en firmar sus obras, pero, cuando sintió que estaba preparado para controlar todo el proceso de hacer vino en la cepa y rematarlo adecuadamente en la bodega, entonces no dudó en hacerlo. Por eso su firma en este Mencia Jose Aristegui es su más sincera muestra de garantía.

VEL'UVEYRA MENCIA (DO Ribeira Sacra)

Vel'uveyra es una melódica expresión gallega que significa "mira la viña". Una expresión tan sencilla como cargada de significado porque mirando la viña, observándola detenidamente, prestándole toda tu atención, cuidándola a mano día a día, es como se elaboran realmente los vinos más personales y honestos.

Así es Ronsel do Sil, la bodega que lidera María José con la incalculable ayuda de Pablo, Felipe y Gabriel. Personal. Honesta. Auténtica. Un proyecto para dejar huella. De ahí su nombre, que como en el caso del Veluveyra Mencia, nos da alguna que otra pista sobre sí mismo... "Ronsel" es "surco" en gallego. El origen de este surco que se ha abierto camino hasta convertirse en una de las bodegas más interesantes de la Ribeira Sacra se inició gracias a María José, arquitecta de profesión y amante del vino por vocación. Sus vinculos personales con Galicia la llevaron a descubrir la Ribeira Sacra, donde se enamoró de un viejo lagar a pie de rio en los cañones del Sil. Lo tenía claro nada más verlo. La María José arquitecta quería recuperar el viejo lagar y la María José enóloga quería convertirlo en la vanguardista bodega que es hoy. Allí podía reunir sus dos pasiones. Allí podía cultivar una agricultura sostenible, biodinámica y respetuosa con las variedades tradicionales. Allí podía hacerse la vendimia a mano y cuidar personalmente de las viñas, hasta podía tener un jardin donde plantar todas aquellas variedades autóctonas que casi desaparecen y había que recuperar. Allí podía hacer algo especial... Y lo hizo.

Y lo hace. Prueba de ello es el Veluveyra Mencia. Un tinto nacido a 400 metros de altitud en los graníticos suelos de las "leiras" (fincas) de Barxacova, la ladera con más flora atlántica de los cañones del Sil. Cepas de Mencia (90%) y Garnacha tintorera (10%) de entre 10 y 60 años vendimiadas a mano. Pura viticultura heroica. Fermentado sin levaduras en tinos grandes de roble francés y depósitos de acero inoxidable con maceración durante 25 días. Y crianza de nueve meses en barricas de roble francés. Un señor Mencia.

Mira la viña. Y tómalo entre 14 y 16 grados para apreciar todos sus matices y potencial.