Obra nueva
Garnach de cepas viejas vendimiadas a mano con sumo cuidado para elaborar un vino único del que apenas existen 600 botellas.
Para hablar sobre Lar de Ricobao hay que hacer un homenaje al valor afectivo del nombre que Julio y sus amigos decidieron ponerle a la bodega.
Primero Lar, el sentimiento. Para un gallego el lar es su patria, su familia, su rincón amado, sus cariños íntimos, sus amores todos, sus antepasados, lo que no se olvida jamás, lo que vive perenne en el recuerdo hasta la muerte. No hay palabra con mayor carga de significado en Galicia. Después Ricobao, la realidad específica y concreta de un lugar. Allí, Julio y sus amigos buscan la identidad, la tradición y la historia compartid por tod@s.
Este grupo de autores soñaron con un proyecto que les acompaña desde la infancia: elaborar vino. Había mucho que hacer. Recuperar los viejos viñedos de amigos y familia, convencer a los viticultores de la zona, construir la bodega donde perpetuar su sueño... Era una loca utopía de juventud. Era Lar de Ricobao. Ese proyecto vital que no se puede olvidar, ese sueño que admiramos en el reflejo de quien un día dejó de soñar y se puso manos a la obra para convertirlo en realidad. Lar de Ricobao nació desde la honestidad para ofrecer vinos de los que sentirse orgullosos, entendiendo que el orgullo es sinónimo de satisfacción personal y tradición. Compartir y celebrar con vino es algo característico de Galicia. A Julio y sus amigos les gusta su tierra, y como les gusta, también les gusta su vino. A eso saben los vinos de Lar de Ricobao, a Ribeira Sacra. ¿Qué es lo que quieren sus autores? Que sus vinos formen parte de las celebraciones familiares como un miembro más, que gusten a sus amigos, que sean objeto de alegría y celebración en sí mismos.
En los fértiles valles lucenses de Quiroga y Ribas de Sil, se concentran las leiras que sirven a Julio y sus amigos para hacer vino. Y la climatología única de esta zona confiere a las variedades de uva que se cultivan unas condiciones excepcionales para su elaboración, tanto tinto como blanco. También ayudan los suelos arenosos en la vega del río y los suelos pizarrosos en sus laderas. Por algo son las uvas más apreciadas de la zona. La orografía del paisaje, con escarpadas pendientes, no permite formas intrusivas de vendimia ni cultivo, todo se hace de forma artesanal respetando las tradiciones de la tierra. Allí se ha detenido el tiempo y las cosas se hacen como mandan siglos de tradición vitivinícola y la sabiduría transmitida por generaciones. Para Julio y sus amigos el vino no es sólo el resultado, también es importante el proceso. Son un ejemplo de bodega sostenible, donde el compromiso y el respeto al entorno son un acuerdo compartido con los pequeños agricultores que participan de su sueño.
Y si tú también quieres formar parte del sueño, cierra los ojos y prueba La Denostada (Lar de Ricobao, DO Ribeira Sacra). No te dejes engañar por su nombre. "La Denostada", la rechazada, es sólo un guiño a su exclusivo origen. Si bien es cierto que la Garnacha era una variedad de uva que nadie valoraba y era denostada para elaborar vino, también es verdad que hoy por hoy se aprecia como nunca. Entre quienes siempre reconocieron su potencial estaban Julio y sus amigos. Un día descubrieron que había cepas de Garnacha en el valle, “A da cajada”. Eran pocas y muy antiguas pero merecían recuperarse. Y así lo hicieron: vendimiando a mano, con mimo y cuidado, consiguieron poco más de 1000 kilos de uva sana, fuerte, con un color especial, con el que elaborar un vino único y exclusivo. Tras 15 meses en barricas de roble francés y americano, el resultado era un vino de autor, cuyo sabor evoca el corazón de la Ribeira Sacra. Un vino que ha dado mucho que hablar pero solo para unos pocos privilegiados porque apenas existen 600 botellas. Pruébalo y tus labios jamás pronunciarán deshonra alguna hacia la Garnacha . Pruébalo y, lo único que tus labios querrán, será repetir el viaje por la Ribeira Sacra.
Son much@s quienes han probado esta obra. Tant@s como quienes han repetido. Sin embargo, parece que nadie ha compartido sus impresiones todavía... Probablemente porque prefieren guardar en secreto el tesoro recién descubierto o, sencillamente, porque se han quedado sin palabras. Sea como fuere, si crees haber encontrado dichas palabras, te agradeceríamos que estrenaras los comentarios con tu sabia opinión. Tienes que estar registrad@ para comentar por una razón llena de lógica: si no estás registrado, nos parece difícil que hayas probado esta mismísima obra maestra de artesania.