Obra nueva
Los ingredientes artesanales para preparar el auténtico caldo gallego tradicional: las patatas, los grelos (o las nabizas, berzas o el repollo según temporada), las habas y la selección del cerdo que necesitas. Solo añade un trozo de ternera para el toque final y tendrás un fantástico caldo para 8 personas. La receta paso a paso para cocinarlo va incluida.
Patatas gallegas, kennebec, cultivadas de forma tradicional por labradores para su propio consumo.
En Galicia no hay leira familiar sin ellos. Los nuestros, siempre de cultivo natural y tradicional
Este vino blanco es fruto de la viticultura heroica que practica Javier en plena Ribeira Sacra....
La alubia que no falta nunca en las casas de la aldea. Naturales de la leira familiar
Mini lacón de lechones criados por Juan y su hermano en su granja.
Elaboración artesanal tradicional. Ingrediente imprescindible para un buen caldo gallego
Gordura del cerdo ideal para sazonar cualquier caldo.
Aquí tienes los ingredientes necesarios para sobrevivir al invierno con un buen "caldo gallego tradicional": las patatas, los grelos (u otra verdura de temporada), el laconcito, la pata de cerdo, un trocito de unto y las habas de caldo. Solo te falta un trocito de ternera y la receta. Lo primero, en cuanto encontremos la mejor ternera de autor que podamos encontrar, la incluiremos también. Lo segundo, además de incluir en la cesta una hoja con la receta, también la ponemos a tu disposición a continuación:
LA NOCHE ANTERIOR
Dejaremos toda la noche anterior las habas en un bol lleno de agua -hasta cubrirlas- para poder cocinarlas al día siguiente.
MIN. 0 - EMPEZAMOS CON LA CARNE
Vamos a cocer en una olla grande todas las piezas de carne que tenemos: El laconcito, la pata de cerdo, el trozo de unto y de manera opcional -aunque muy recomendada- una pieza de aguja de ternera que podéis encontrar vosotros en cualquier carnicería. Introducimos todo en una olla y echamos agua fría hasta cubrir toda la carne. Ponemos la olla al fuego y cuando llegue al punto de ebullición tapamos para cocinar a fuego lento, así deberá estar durante todo el proceso.
MIN. 60 - ECHAMOS LAS HABAS
Tras una hora de cocción de la carne, escurrimos el agua de las habas que habían estado a remojo toda la noche para introducirlas ahora en la olla con la carne. Siguiendo los tiempos que proponemos en esta receta, las habas deberían estar perfectas para el momento de servir. Como sabemos que muchas veces vamos justos de tiempo o por lo que sea nos vemos obligados a acelerar la receta... os proponemos un truco para que las habas se cuezan más y más rápido:
Pasado un rato lo primero de todo será probarlas. ¿Nos parece que están duras? Lo que haremos será “asustarlas” introduciendo en la olla un vasito de agua fría que parará momentáneamente el hervor. Podemos realizar este truco varias veces a medida que se cocina nuestro caldo, -cuantas más veces lo hagamos más se acelerará la cocción de las habas.
MIN. 70 - PELAMOS, CORTAMOS Y ECHAMOS A COCER LAS PATATAS
Es un buen momento para probar el agua de nuestro caldo y decidir si tiene suficiente sabor a carne -o no-. En nuestro caso vamos a retirar ahora el trozo de unto -que deshecharemos-, ya que su sabor es tan fuerte y característico que no queremos que enmascare al resto de sabores.
Pelamos las patatas y las cortamos en trozos -más bien finas y no demasiado grandes-. Las echamos a la olla.
MIN. 90 - PREPARAMOS Y ECHAMOS A COCER LAS VERDURAS
Vamos a cortar la verdura que tenemos. Para agilizar la tarea y ahorrar un poco de agua, vamos a mediar nuestro fregadero de agua fría para ir echando la verdura cortada y lavarla toda junta.
En el caso de los grelos: Deshechamos el extremo inferior del tallo, es decir, la parte más gruesa y también la “punta”, la parte superior más fina del grelo. Lo que nos queda lo partimos con la mano por la mitad quedándonos con dos trozos que echamos al agua para lavarlos.
En el caso de otras verduras: Deshechamos el extremo inferior del tallo y cortamos la hoja a mano, aproximadamente en tres o cuatro trozos proporcionales -cada trozo se quedará más o menos del tamaño de una hoja de lechuga.
Limpiamos la verdura a base de de enjuagarla y revolverla en el agua con las manos. Probamos el agua del caldo y si está a nuestro gusto retiramos toda la carne con una espumadera. Vamos cogiendo la verdura a montoncitos con las manos, escurriendo el exceso de agua y echándola a cocer.
MIN. 105 - EMPLATAMOS Y LISTO ¡BUEN PROVECHO!
Han pasado 15/20 minutos desde que echamos la verdura. ¡Nuestro caldo gallego tradicional está listo! No hay ningún problema si queremos congelar el caldo sobrante en envases de plástico tan pronto como se enfríe. ¡Buen provecho! No hay nada mejor en un día de invierno.
¡¿Y AHORA QUE HAGO CON TODA ESTA CARNE?!
En la aldea no se tira nada. Podemos utilizar la carne como segundo plato o guardarla en la nevera para prepararla otro día.
Hay muchas formas de preparla. Una de ellas sería cocerla de nuevo en agua limpia durante 45 minutos y en su misma agua cocer unas patatas como acompañamiento. Retiramos y aderezamos con un chorrito de aceite de oliva y pimentón.
También se puede comer en frío a modo bocadillo o hacer canapés, la carne cortada en lonchas finas y acompañada con pan.
Son much@s quienes han probado esta obra. Tant@s como quienes han repetido. Sin embargo, parece que nadie ha compartido sus impresiones todavía... Probablemente porque prefieren guardar en secreto el tesoro recién descubierto o, sencillamente, porque se han quedado sin palabras. Sea como fuere, si crees haber encontrado dichas palabras, te agradeceríamos que estrenaras los comentarios con tu sabia opinión. Tienes que estar registrad@ para comentar por una razón llena de lógica: si no estás registrado, nos parece difícil que hayas probado esta mismísima obra maestra de artesania.